DESDE AQUÍ UD. PUEDE IR A:

CONVOCATORIAS

CONVOCATORIAS

Martes 5 de noviembre
19,00 h.
Ateneo de Jerez
Encuentro literario hispano-marroquí. Lectura poética.
Poetas marroquíes:
Hassan Najmi, Mourad El Kadiri, Boudouik Benamar, Azrahai Aziz, Khalid Raissouni, Ahmed Lemsyeh, Jamal Ammache y Mohamed Arch.
Poetas gaditanos:
Josefa Parra, Dolors Alberola, Domingo F. Faílde, Mercedes Escolano, Blanca Flores y Yolanda Aldón.
* * * * * * * * * *

27 de mayo de 2010

Por la inmediata apertura del Museo Arqueológico de Jerez. Comunicado del Ateneo a la opinión pública jerezana


Ante el cierre del Museo Arqueológico, que va PARA CINCO AÑOS, y ante los repetidos incumplimientos de otras tantas promesas y declaraciones, la Junta Directiva del Ateneo de Jerez , ha acordado llevar a cabo una difusión ante la opinión publica de Jerez, a fin que ningún jerezano ignore esta situación.   
Es por ello, que va a pedir a todos los medios de comunicación que se hagan eco del escrito que se detalla. 
También, pedimos que el mismo se envíe a todos los contactos que cada uno tenga y pedirle a su vez que lo reenvíe.   
Sólo la sensibilidad de los Jerezanos podrá lograr que el Museo Arqueológico se abra de una vez, ya no caben mas promesas y declaraciones, sólo lo creeremos cuando lo veamos abiertos, cuando los jerezanos y los visitantes podamos disfrutar de él.  


Un museo sin puertas 

En 1935, el Museo Arqueológico de Jerez, abrió sus puertas. D. Manuel Estévez, que había catalogado los fondos arqueológicos municipales, existentes desde 1873, y había excavado en las ruinas de Asta Regia, pone en funcionamiento esta institución en el precioso edificio renacentista del Cabildo “viejo”, nombre por el que entonces lo conocíamos. 
Con buen criterio, se proyecta llevar esta colección a una nueva sede, en donde gozaría de unas instalaciones más acordes con la museística. De esta forma, en 1982 el museo se cierra para no abrirse en sus nuevas instalaciones hasta 1993. Más de diez años sin museo hasta su apertura en la nueva sede de Plaza del Mercado.  
Como si de una maldición se tratara, en el 2005 vuelve a cerrar sus puertas, y hasta la fecha. Obras de mejoras terminadas, promesas de fechas hechas y deshechas, pero no se ve el fin de esta reforma. Ya llevamos sin Museo Arqueológico más de cinco años, parece como si en nuestra ciudad no llegara a asentarse del todo esta cultura, al menos a niveles de responsables políticos.  
Nos basamos en la propia Ley de Patrimonio Histórico Español 16/1985, que define a los Museos como las instituciones de carácter permanente que adquieren, conservan, investigan, comunican y exhiben para fines de estudio, educación y contemplación conjuntos y colecciones de valor histórico, artístico, científico y técnico o de cualquier otra Naturaleza cultural. Pues no hay que decir casi nada más, todo esto es lo que nos estamos perdiendo en nuestra ciudad con un museo de puertas cerradas.  
Los datos cantan por sí solos. En Jerez, la población menor de 20 años ronda las 49.000 personas, la gran mayoría de estos jóvenes no conocen, ni tan siquiera saben de la existencia del Museo Arqueológico de su ciudad. Estos jóvenes han perdido la cultura de visitar su museo de arqueología, y habrá que trabajar mucho en un futuro para que la adquieran. Muchos habrán perdido esa oportunidad para siempre. Estamos hablando solamente de los jóvenes y los contamos por decenas de miles, pero el resto de la población –Jerez es la quinta ciudad de Andalucía- tampoco tiene museo. Ni los que estudian, ni los que investigan, ni los que educan, ni los que desean contemplar las piezas que ahora se atesoran en algún escondite dormido. 
Ciudadanos de Jerez o visitantes tienen las puertas cerradas, como si no hubiese nada, como si la historia no hubiese pasado por nuestra tierra.  
Jerez, ciudad educadora, Jerez, ciudad de turismo, Jerez, ciudad de los museos, la mejor inversión es la educación y la enseñanza de la ciudadanía… Frase tras frase, foto de portada en las torres del Alcázar, anuncios de nuevos museos a artistas jerezanas, y ojala todo sucediera así. Pero nuestro principal Museo, nuestro mejor patrimonio histórico, el más fundamental, sigue dormido. Nada se dice ya, todo callado.  
Ciudades cercanas mantienen orgullosamente su Museo Arqueológico ABIERTO. Sus ciudadanos, pequeños y mayores, lo visitan y así comprenden su historia, aprenden de dónde vienen, cómo se ha desarrollado su ciudad.  
Cádiz, Algeciras, San Fernando, Puerto Santa María, y otras de pequeño tamaño como Villamartín, Espera, Olvera y San Roque. Todas ellas con menor número de habitantes que Jerez, sin contar el importante número de visitantes que tiene nuestra ciudad.  
De sobra es sabido que la apuesta turística tiende cada vez más hacia la cultura, en Jerez ya hay algunas opciones en este sentido, pero el Museo Arqueológico no entra en este paquete, parece que no hay interés por parte de nadie en mostrar algo que ya tenemos, que no hemos de adquirir. El visitante se va pronto de Jerez porque gran parte de nuestro patrimonio está cerrado, y entre ellos nuestro museo. Como datos significativos el Museo del Prado recibió durante el pasado año una cifra cercana a los 2.500.000 visitantes, los museos de Andalucía en 2006 algo más 6.600.000 visitantes, y el Museo de Cádiz en 2007 alrededor de los 75.000 visitantes. Proporcionalmente Jerez está dejando de dar, y de darse, la oportunidad a muchos miles de personas de conocer su historia y patrimonio.  
Desde nuestro Ateneo opinamos que es el momento que nos preguntemos: ¿queremos nuestro Museo Arqueológico?, y si así lo deseamos nos pongamos en marcha: HAY QUE ABRIR SUS PUERTAS.
     
Ateneo de Jerez

26 de mayo de 2010

"Festival de la Palabra" rinde homenaje a Miguel Hernández


Los poemas de Miguel Hernández se vertieron anoche sobre Jerez. El sencillo homenaje, a cargo de poetas y lectores de poesía -casi todos agrupados en la asociación Argónida-, se celebró en La Trocha, un bar céntrico y concurrido que, por obra de las circunstancias, se convirtió en el protagonista de la noche.  
Estaba a rebosar y era lógico. Se hacía necesario este homenaje, recuperar la voz del poeta oriolano y lanzarla a los vientos, desnuda, sin mixtificaciones comerciales, portadora de su verdad, antes de que el sistema nos la robe y haga con ella lo mismo que con las camisetas del Ché.     
Por lo demás, el acto se inscribía en el contexto de otros ochocientos que, bajo la común denominación de Festival de la Palabra, se celebran en toda Europa.   
Así nos lo dijeron la Sra. Barroso, concejal del Ayuntamiento, y Paco Camas, en cuyo discurso de apertura salió al paso de críticas estúpidas, de esas que hunden su mala baba en el lodazal del sistema, en beneficio acaso de una brizna de vanidad. Para Camas, los poetas son útiles porque saben dar esperanza y esto es lo que hizo Miguel Hernández, desde su triple compromiso, literario, político y humano, en una obra coherente y, por supuesto, hermosa. Recuperar a Miguel Hernández –dijo para finalizar- es un deber de España, es un deber de amor.    
Y los poetas intervinientes le prestaron su voz, que sonó intensa e invadió la ciudad. Josefa Parra, Ricardo Rodríguez, Sara Jiménez, Darío Pérez Carvajal, Manuel Márquez, María Centeno, Mercedes González, Carmen Flores y Julia Bellido, entre otros, leyeron los poemas fundamentales del repertorio hernandiano, que demostraron, una vez más, la vigencia de una Poesía, que es preciso escribir con mayúscula. El cantautor Carlos Aguilera interpretó varias piezas, con textos del poeta homenajeado.   
             
Redacción.-

22 de mayo de 2010

Manuel Francisco Reina presentó su novela "La emperatriz amarga"


Natividad Montaño y Francisco Antonio García Romero fueron los encargados de presentar, respectivamente, al autor y su novela, en el acto celebrado ayer por la tarde, bajo los auspicios de La Luna Nueva y Roca Editorial.  
La emperatriz amarga, del escritor Manuel Francisco Reina, cuenta la triste historia de Sabina, la adolescente gaditana que, con apenas doce años de edad, es entregada en matrimonio al emperador Adriano, su primo, mucho mayor de ella, que la utiliza para legitimarse en el trono, tras la muerte de Trajano, tío de la muchacha. La boda, sin embargo, no le abriría las puertas de la felicidad, sino todo lo contrario. Sabina, que despreciaba y odiaba a su esposo, fue maltratada por éste, hasta el extremo de ordenarle poner fin a su vida.  
Antes de obedecer la orden de Adriano y beber la cicuta, llama a su lado a Julia Balbilia, poeta de la corte, a quien cuenta su vida. De este modo, Julia se convierte en la, voz narradora del libro y da a conocer las sevicias padecidas por la emperatriz y el humillante papel social de las mujeres en el Imperio, sometidas a sus padres y maridos y absolutamente discriminadas.  
La novela no se detiene aquí. Manuel Francisco Reina afirmó que esta obra viene a ser, entre otras cosas, un alegato sobre la discriminación de la mujer y la constatación de que, después de dos mil años de historia, no hemos cambiado apenas ni en lo que se refiere a las relaciones personales ni aún menos en los engranajes y mecanismos del poder.  
El autor, que confiesa haber tardado un lustro en dar forma a este libro, afirmó que el noventa y cinco por ciento de los hechos narrados son totalmente reales, de acuerdo con las fuentes que consultó y contrastó de manera exhaustiva, por lo cual la ficción consiste en un proceso de construcción psicológica de los personajes para dotar sus actos de coherencia.   
Manuel Francisco Reina (Jerez, 1974), es licenciado en Filología Hispánica por la Universidad de Cádiz. Su carrera se ha desarrollado entre el periodismo y la literatura. En su faceta de novelista, ha publicado Los Santos Varones, La coartada de Antinoo y La mirada de sal. Autor de varias antologías, compilaciones y una obra de teatro, tiene en su haber algunos libros de poesía, entre los que destacan La razón del incendiario, La lengua de los ángeles y Las liturgias del caos.   
            
Redacción.-

"Versos en plenilunio", nuevo ciclo de lecturas poéticas para recibir el verano



Por más que el futurista Marinetti recomendara matar el claro de luna, creyendo que con ello se habría de poner fin al Romanticismo, el satélite de la Tierra ha seguido ejerciendo una enorme fascinación entre los poetas, a pesar de que la carrera espacial y demás aventuras cosmonáuticas han restado al pequeño astro buena parte de su misterio y el escaso prestigio de que gozara.  
Afortunadamente, en esto, como en tantas otras cosas, la poesía suele bogar a contracorriente.   
Diversas entidades comerciales, radicadas en Jerez de la Frontera y El Puerto de Santa María, acogerán, un ciclo de lecturas poéticas. Versos en plenilunio, que así se denomina, pretende de este modo acercar la poesía a los ciudadanos, en un ambiente grato y distendido.   
El bar La Moderna (25 de mayo), la cervecería Los Dos Deditos (1 de junio), el café bar Damajuana (8 de junio) y el café bar Patio, en El Puerto de Santa María, (15 de junio) serán, en esta ocasión, foros abiertos a la poesía y lugares de encuentro para quienes la aman. Las actividades programadas se celebrarán a las 9 de la tarde, a excepción de las de clausura, previstas para el 22 de junio: en La Moderna (8,00 de la tarde), Los Dos Deditos (a las 9) y Damajuana (a las 10).    
Intervendrán, entre otros, Francisco Lambea, Rosario Troncoso, Carmen Sáiz Neupaver, Sandra Rubio, Amaya Blanco, Sara Gutiérrez, Celia Aguilar, Francisca Cortés Espinosa y Juan Pedro de Cosa.   
      
Redacción.-

21 de mayo de 2010

Pere Gimferrer: conferencia y lectura poética. El autor de "Arde el mar" fue presentado por el poeta José Luis Rey


Los protocolos institucionales, que en esta ocasión corrieron a cargo de la Sra. Barroso, concejal de cultura del Ayuntamiento jerezano, dieron paso a las palabras del poeta cordobés José Luis Rey, quien tuvo sobre sus hombros la responsabilidad –también un privilegio- de presentar a Pere Gimferrer.  
No era fácil empeño, éste de abrir el fuego de una velada, que resultó brillante. Presentar a un poeta de la talla de Gimferrer no es tarea que se salde con un poco de oficio y un léxico de gala para consumo de recién llegados, menos aún si el público asistente estaba compuesto en su mayoría por poetas, escritores, catedráticos de literatura… entendidos, vamos. Por eso, José Luis Rey, estudioso avezado del autor catalán, trazó su recorrido con rigor crítico, en un formidable discurso.  
Pere Gimferrer dio comienzo a su intervención con una intencionada referencia a su último libro, es decir, al que está preparando en la actualidad, sometido aún, por tanto, a correcciones, siempre en busca de la palabra, esa palabra fundadora y definitiva, a bordo de la cual navega la poesía, el único género –dijo- que es lo que es y no puede ser otra cosa.  
Sentado esto, el poeta saltó a sus orígenes y se detuvo en la educación sentimental de su generación, a través de lecturas y autores que marcaron la suya propia: Lazarillo de Tormes, el Quijote, Los trabajos de Persiles y Sigismunda, Lope de Vega, Calderón de la Barca, fueron el sedimento donde se posaron voces tan esenciales como las de Góngora, Rimbaud, Rubén Darío, Rilke, Kavafis o Eliot, pasando por la Eneida de Virgilio o el Dante de la Divina comedia. Góngora, sobre todo, como creador de un lenguaje poético, cimentado en la palabra, y Rubén, por su ritmo y musicalidad.  
Como ya hiciera su presentador, salió al paso de tópicos y prejuicios que etiquetan su obra como culturalista. La poesía –manifestaron ambos- se inscribe en la vida y la cultura constituye un cauce para expresarla en toda su intensidad y belleza.  
Para ilustrar lo expuesto, concluyó con la lectura de una espléndida selección de poemas, entre los cuales no pudo faltar su célebre Oda a Venecia ante el mar de los teatros. Una joya, sin más.  
            
Redacción.-

18 de mayo de 2010

Ezequías Blanco presenta en Madrid "Una ceja de asombro"



El poeta Ezequías Blanco acaba de publicar Una ceja de asombro. Acerca de este libro ha escrito Antonio Hernández: La cita inicial de Una ceja de asombro es de un escriba egipcio y ya manifiesta el asunto del libro: el poema, la poesía, su extraño alivio despeñado. El autor, Ezequías Blanco, encuentra su teatro de operaciones merced a una imaginación y una frescura que apuntalan el visionarismo y el pensamiento, la intuición y la reflexión, vigas maestras de su quehacer. La metapoética es así revelada en su gracia de difícil sencillez, y el hacedor, al par que desparpajo, pone ideas, con lo que acuden a su reto tanto la inspiración como el análisis. Los contrarios se asocian y uno sale de este libro con el cofre que guarda la buena poesía abierta, esa que turba en la emoción y perdura en su sustancia.  
Ezequías Blanco nació en Paladinos del Valle (Zamora) en 1952. Ha publicado, hasta ahora, Limitación del vuelo (1979); Palabras de la Sibila (1992 y 2000); En medio del desierto (1996); Archivo de imágenes-Imágenes de archivo (1999) Objetos del amor lejano (1999 y 2005); Los caprichos de Ceres (2004 y 2007); y Otras tribus urbanas (2007). También ha publicado el libro de relatos Memorias del abuelo de un punk (1997 y 1998), la novela Tres muñecos de vudú (2001), así como una edición crítica de Las aventuras de Pinocho (Edelvives, 2004), Islandia 2004 y Construirte un abismo (2008). Desde hace dieciocho años dirige la revista Cuadernos del Matemático.  
El autor estará en La Feria del Libro de Madrid el 30 de mayo, domingo, y el 6 de junio, sábado, de 18,30 h. a 21 h. en la caseta 290 de la editorial Huerga & Fierro.  
      
Redacción.-

El próximo 21 de mayo, se celebra en Sevilla el IV Festival Palabra en el Mundo


La Institución Literaria Noches del Baratillo organiza, en colaboración con la Asociación Proyecto Fahrenheit 451.Las Personas Libro de Sevilla, el grupo Cuentacuentos Ombú, Librería Nuño, Editorial Los libros de Umsaloua, El librepensador diario on line independiente, y Revista Letras, el próximo día 21 de mayo, viernes, a partir de las 19,30 h., en el Salón de Actos del Centro Cívico las Sirenas, en la Alameda de Hércules, de Sevilla, el IV Festival Palabra en el mundo.    
La presentación oficial sera en el Café Eureka -Alameda de Hércules, 65, Sevilla-, el día 20 de mayo, jueves,a partir de las 21 horas, y en dicho acto los poetas participantes ofrecerán un recital.    
Es la primera ocasión que Sevilla acoge esta iniciativa internacional promovida por el Proyecto Cultural SUR Internacional, Revista Isla Negra y el Festival Internacional de Poesía de La Habana, que se desarrolla entre los días 19 y 25 de mayo, en más de quinientas localidades y diferentes continentes. Siendo en total 34 lospaíses participantes.    
Intervendrán los poetas Ana Alvea Sánchez, Tobías Campos Fernández, Esperanza García Guerrero, Daniel García Florindo, Lola Herrera Uribe, Lorenzo Ortega Belchiz, Nieves Peña Martos y Fernando Jesús Rodríguez Massía.   
Se han editado 8 postales poéticas con textos de cada uno de los poetas. Los ingresoso obtenidos se destinarán en su totalidad a Médicos sin Fronteras. Se podrán adquirir en soporte de papel en la Librería Nuño, c/ San Luis 83, 41003-Sevilla. Asimismo, se podrán a la venta en el acto de celebración y en la presentación oficial.   
La palabra poética será complementada con las intervenciones musicales de David Postigo Rodríguez al piano y José Marín a la guitarra. Las literarias vendrán de las voces de las Personas Libro de Sevilla y las escénicas del grupo Cuentacuentos Ombú. El acto será presentado por Vicente Fonseca Soriano.  
         
Redacción.-

14 de mayo de 2010

Mariano Rivera presentó anoche en Jerez "El software de la inmortalidad". El poeta cierra con este acto una brillante gira promocional


Dolors Alberola y Domingo F. Faílde coincidieron en sus respectivas conclusiones: El software de la inmortalidad es un libro que no debemos perdernos, pues nos sorprenderá y, a pesar de que existen diferentes opiniones a la hora de aceptar la utilidad o no de la poesía, útil para el aprendizaje y no me duelen prendas asegurarlo, puesto que en nada se oponen hermosura y utilidad. Un poemario francamente interesante con un final apoteósico que, a su vez, resta tenebrismo a la idea del juicio final, puesto que con esa cancioncilla que acompaña a su despliegue “Quisiera ser tan alta como la luná” nos devuelve a la limpidez perenne de la infancia, a nuestros sueños más dulces, a la falta de miedos y ya no es Caronte ni es Cancerbero el que nos espera al final de la historia que tan maravillosamente nos cuenta Mariano Rivera, sino el delicado eco de un paraíso que sí que comprendemos, puesto que lo poseímos en el tiempo más blanco de los tiempos. En opinión –reiterada- de Faílde, estamos ante un libro apasionante, sacudido por el flagelo de la hermosura e investido por la solemnidad de lo profético y la elegante audacia de toda gran poesía. Un libro convocado no a la estéril polémica, sino al debate reflexivo y enriquecedor. Un gran libro, en definitiva.   
Con estas palabras, los presentadores de Mariano Rivera terminaron su intervención, dando paso al autor, que cerraba con este acto una gira promocional, iniciada en Madrid, con obligada estación en El Escorial, Cádiz, El Puerto de Santa María, Sanlúcar de Barrameda y, finalmente, Jerez de la Frontera, su ciudad natal. El acto se celebró en la sede de la Fundación Caballero Bonald y congregó a un público numeroso e interesado.    
Las palabras protocolarias de Ricardo Rodríguez, representante de la entidad anfitriona, dieron paso a Dolors Alberola, que dijo, entre otras cosas: Mariano Rivera, logra en él la cuadratura del poema; efectivamente, da a la mayor parte de su trabajo esa figura física y cuadrángula, pero va más allá -quizás donde el poeta roce un día la inmortalidad-, va hasta el punto exacto en donde lo más material, lo más científico, lo más palpable, vuelca su relativa exactitud en el contrario de su imagen, mutando lo tangible en intangible, puesto que entre sus líneas, llegamos a tocar con los ojos la parte más imposible de lo posible. Dicho en palabras más comunes, Rivera ha conseguido exprimir cada página de la más actual enciclopedia científica, amalgamar el líquido aparente con el extraído de las más novedosas teorías de futuro y dejar ante nosotros la rosa purísima, aquella de la que dijo Juan Ramón, no la toquéis ya más… que así es la ciencia –añadiría yo-.   
Por su parte, Domingo F. Faílde, tras exponer los conceptos básicos del pensamiento transhumanista, situó el libro de Mariano Rivera en el contexto de esta filosofía, a la que opone el poeta su sentido trascendente de la vida y la búsqueda de una divinidad que, sin embargo, permanece en silencio. Faílde valoró positivamente las audacias y riesgos que asume el autor, consciente en todo caso de que el hecho poético, como acto creador, debe constituir un salto hacia delante o, como dice José Luis Abellán, "exige romper los moldes". Si ya lo es la propia concepción del poema, el lenguaje, ligado íntimamente al contenido, despliega ante el lector una gran variedad de registros, que revelan al propio poeta: un hombre de su tiempo, imbuido por tanto de la cultura contemporánea y sabio conocedor de las hablas y jergas de un entorno marcado por la diversidad. Así, el castellano estándar convive con cultismos y tecnicismos e incorpora, sin complejo alguno, muchas palabras que el español de uso ha importado de otros idiomas, comenzando por el léxico y locuciones de la informática, que, en tanto imprimen al texto la frescura de lo cotidiano, contribuyen a configurar la gran metáfora de este libro: estamos programados para la inmortalidad. O, en el supuesto contrario, como afirma el autor en el poema Catagénesis del progreso, "Sin comparación, siguiendo los dictámenes de la sabiduría, es más revolucionario detener el progreso por solidaridad con el amor, que calzarse botas de gigante para llegar a tiempo de ver la desintegración del cosmos en el vacío".    
Finalmente, Mariano Rivera leyó y comentó los poemas más significativos del libro y, como es habitual en estos actos, firmó ejemplares del mismo.  
           
Redacción.-

8 de mayo de 2010

“Yo, Juan, el discípulo amado”. Emilio Ruiz Barrachina lleva al cine una conocida novela de Rafael Esteban Poullet



Yo, Juan, el discípulo amado es el título de la novela de Rafael Esteban Poullet, poeta y narrador portuense, que ha servido de base al guión de El discípulo, una película de Emilio Ruiz Barrachina, con un atractivo reparto y rodada en los desolados parajes de las hoyas de Baza y Guadix.    
La cinta, que ha suscitado ya numerosas polémicas, aborda la vida de Jesús Nazareno desde una perspectiva meramente histórica (la resistencia del pueblo judío frente al invasor romano), al margen de la mitificación religiosa del protagonista y sus implicaciones doctrinales.    
Sin embargo, como cabía esperar, existe cierta distancia entre el texto de Rafael Esteban Poullet y lo que ve en pantalla el espectador. Las obras literarias alimentan al cine muchas veces, pero éste las digiere a su manera, incluyendo esa cucharada de bicarbonato sódico que suele exigir el omnipotente mercado.     
Faelo, que asistió al estreno, el pasado 11 de abril, manifestó a los medios que, si bien el guión es, por lo general, respetuoso con la novela, omite planteamientos importantes, como el triángulo Jesús-Judas-Juan y la negación del fenómeno de la Resurrección.
Estamos, en cualquier caso, ante una película bella e interesante, que conviniera ver y analizar, contrastándola, a ser posible, con la novela, que es de obligada lectura, a la hora de reflexionar sobre aquella y valorar la posición, tanto del escritor como del director.
Una notable banda sonora, que incluye letras flamencas del poeta Félix Grande, completa los atractivos del film.  
      
Redacción.-

7 de mayo de 2010

Mariano Rivera Cross presentó "El software de la inmortalidad" en El Puerto de Santa María


Tras la presentación oficial, en Madrid, celebrada el mes pasado, el poeta Mariano Rivera Cross y la editorial Huerga & Fierro están acercando El software de la inmortalidad a los lectores andaluces y así, el miércoles 5, tuvo lugar en el Ateneo de Cádiz un acto de presentación, a cargo del autor y de José Pallarés, profesor de la UNED gaditana, quien dijo, entre otras cosas, que el libro es una apuesta por la vida, a pesar del pensamiento transhumanista, vigente en nuestros días, que amenaza con la extinción de la inteligencia y el espíritu.    
En esta misma línea, ayer, 6 de mayo, la espléndida biblioteca del antiguo colegio San Luis Gonzaga, donde estudiaron, entre otros, Juan Ramón Jiménez y Rafael Alberti, acogió un nuevo acto que, también en esta ocasión, llenó, prácticamente, el recinto. Entre los asistentes, numerosos poetas de El Puerto de Santa María y la vecina ciudad de Jerez.    
Actuó como presentador Domingo F. Faílde, que, después de trazar las líneas maestras del pensamiento transhumanista, situó la obra de Mariano Rivera en el contexto de la literatura actual, destacando la posición heterodoxa del autor, su valerosa de crítica de la sociedad contemporánea y el riesgo que supone traspasar las fronteras de los géneros literarios para crear un discurso innovador, con un lenguaje que, ligado íntimamente al contenido, despliega ante el lector una gran variedad de registros, reveladores de la personalidad del propio poeta: un hombre de su tiempo, imbuido por tanto de la cultura contemporánea y sabio conocedor de las hablas y jergas de un entorno marcado por la diversidad. Así, el castellano estándar convive con cultismos y tecnicismos e incorpora, sin complejo alguno, muchas palabras que el español de uso ha importado de otros idiomas, comenzando por el léxico y locuciones de la informática, que, en tanto imprimen al texto la frescura de lo cotidiano, contribuyen a configurar la gran metáfora de este libro: estamos programados para la inmortalidad.    
Intervino, a continuación, el propio Mariano Rivera, que reveló al auditorio algunos detalles de la creación de este libro, para leer y comentar varios textos de El software de la inmortalidad. Estamos ante un libro apasionante -había dicho Faílde-, sacudido por el flagelo de la hermosura e investido por la solemnidad de lo profético y la elegante audacia de toda gran poesía. Un libro convocado no a la estéril polémica, sino al debate reflexivo y enriquecedor. Un gran libro, en definitiva.    
El próximo jueves, día 13, a las 20,30 h., el libro será presentado en Jerez. En el acto, que se celebrará en el salón de usos múltiples de la Fundación Caballero Bonald, intervendrán, además de Mariano Rivera, los poetas Domingo F. Faílde y Dolors Alberola.  
       
Redacción.-