El sida, llamado cáncer rosa en otro tiempo por su incidencia en el colectivo gay, fue sin duda la primera pandemia de la contemporaneidad y acaso la más mortífera. De orígenes inciertos, se propagó al principio entre grupos considerados marginales, caso de los heroinómanos, entre los que causó una enorme mortandad. Hoy, sin embargo, después de más de dos décadas de estragos, los esfuerzos de la ciencia y la presión de la sociedad han convertido a esta plaga en una enfermedad crónica.
Será tal vez por ello que la gente ha bajado la guardia y el uso del preservativo, que constituye la única barrera eficaz contra esta enfermedad, ha disminuido notablemente, mientras aumentaba, por el contrario, el número de infectados. La amenaza del sida se cierne sobre todos los individuos, sea cual sea su orientación sexual y al margen de otros hábitos.
Para despertar la conciencia ciudadana, hoy se celebra una jornada de reflexión y lucha, que en Jerez de la Frontera ha liderado el colectivo Jerelesgay, movilizando a otros grupos sociales y trasladando a los espacios públicos esta legítima y justificada preocupación.
Anoche, en el salón de actos de la Fundación Caballero Bonald, tuvo lugar una lectura poética en apoyo de esta efeméride, en la que los poetas Josefa Parra, Dolors Alberola, Isabel de Rueda, Rosario Troncoso, Domingo F. Faílde, Mauricio Gil Cano y Mariano Rivera pusieron voz a poemas de autores homosexuales, tras la intervención de las autoridades locales, que hicieron breve acto de presencia. Rosario Montoya, conocida en el mundo artístico como la Reina Gitana, puso punto final a la velada.
Por su parte, Susana Domínguez y Bibiana Ortega, representantes de la entidad organizadora, condujeron el acto con discreción y acierto, resaltando en sus breves y bien elaborados discursos la necesidad de redoblar la alerta frente al sida y el esfuerzo común contra la enfermedad.
Redacción.-